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Kyoto y sus monumentos: centro de la cultura Japonesa. |
La
cultura Japonesa
Gonzalo García Estévez
1. Una característica muy
especial de la lengua japonesa, es la existencia de niveles o estilos en el
habla de acuerdo con la situación – lenguaje ordinario, lenguaje humilde o
lenguaje honorable dependiendo del grado de respeto hacia la persona la persona
en cuestión, pero hay que tener un dominio absoluto del idioma para aplicar esa
diferenciación.
Las diferencias en los modos
de comunicación entre hombres y mujeres simplemente difiere en el respeto, las
mujeres sienten un absoluto respeto al hombre. Sin embargo la generación que
viene no está por la labor de conservar esa tradición y los jóvenes en ese
sentido son mucho más radicales e inconformistas (por lo menos en comparación
con Europa).
2. Es una falta muy grave
decir no en algunas circunstancias, como una invitación a cenar o a comer, a
participar en una reunión, a tomar un café o incluso a ir a un karaoke. En ese
sentido son más cuadriculados que los alemanes, a veces puede dar la sensación
de estar tratando con robots…. Pero a los occidentales por el mero hecho de ser
occidentales les serán perdonados los “descuidos” en el comportamiento diario.
3. Los hombres al igual que
las mujeres son muy machistas. En una reunión, el que lleva la voz cantante
siempre suele ser el hombre. Para los japoneses su empresa es como su casa, su
entorno, al que quieren, respetan y luchan por ella, independientemente de su
puesto, salario y condición. El grado de vinculación y de relación que hay
entre empresa – empleado es muy estrecho, nunca escucharás a nadie decir que
está descontento con su empresa; el índice de rotación es bajísimo. Es muy
normal el ver una persona que ha estado toda la vida en una empresa. Cuando hay
una rotación interna y un empleado se cambia de departamento es un drama y un
acontecimiento.
Respecto a la "voz
cantante", en las reuniones, siempre, siempre empieza y acaba hablando el
jefe. La figura del jefe aquí es sagrada, la jerarquía es importantísima y
nadie se la puede saltar.
El jefe siempre tiene que
estar por encima tuyo, inclusive físicamente, el jefe de pie y los subordinados
sentados, inclusive cuando tu jefe está sentado y tú o cualquiera del equipo
tiene que darle información o hablar con él, es de buena educación ponerte en
cuclillas, ya que sería una seria ofensa que el empleado esté por encima.
4. Normas de caballerosidad:
Las mujeres guardan pleitesía al hombre, por lo que es al contrario de lo que
ocurre en Europa; las mujeres dejan pasar al hombre primero al entrar en el
ascensor, en el metro, etc
En una situación que tú
quieres dejarla pasar, normalmente ellas se mantienen firmes en su postura y
esperan a que tú pases.
5. No son para nada
xenófobos, en algunos aspectos tienen una percepción de superioridad frente a
algunos países, pero no menos que las que tienen los americanos, los franceses,
ingleses, etc. Piensan en algunos aspectos Occidente está bastante atrasado,
por ejemplo en el sector tecnológico o en el sector de las comunicaciones.
Piensan que Occidente va por detrás suya (no les falta ninguna razón).
Tratan especialmente bien a
los empleados occidentales que aterrizan por allí, todo son deferencias y
consideraciones, invitaciones a comer y cenar semanalmente, y montones de
regalos. En el trato humano y personal superan a Occidente, puesto que están
muy pendientes de que no te falte de nada.
6. Sería impensable que un
japonés copie o plagie, eso va contra los principios básicos, que son las
normas, la ética, y la moral y un japonés nunca, nunca se puede saltar esos principios
básicos. Los índices de robo, asesinatos, por ejemplo, son de los más bajos del
mundo.
También tienen uno de los
índices más bajos de piratería, software, películas música, artículos (no existe
el "top manta" y la venta ambulante está prohibida).
Sociedad
Cuando empiezas a conocer a japoneses,
a hablar con ellos y te cuentan que trabajan 13-14 o incluso más horas al día
sólo para que la empresa vaya bien, te das cuenta de que son distintos. En
Japón hay una cultura de admiración por las empresas, cuando alguien se
presenta se dice antes el nombre de la empresa y luego el de la persona (Es el
caso de las Meishi, tarjetas que se intercambian los japoneses para mantener el
contacto donde el nombre de la empresa aparece primero)
La empresa es lo más
importante, hay que darlo todo por la empresa, hay que seguir sus normas a
rajatabla. En definitiva, los japoneses hacen, lo que tienen que hacer. Cuando
alguien está trabajando en una empresa, nadie se queja, nadie crea algo nuevo
por peligro a meterse en líos, no hacen huelgas casi nunca. La estructura de
las empresas japonesas es muy muy rígida, hay que hacerlo todo según está
escrito en las normas.
Lo de las horas extra es
como una obligación, es la forma que tiene de agradecérselo a la empresa y de
manera indirecta a su país para salir de la crisis, pero claro los beneficios y
ayudas que tienen los empleados son impresionantes. Consideran que las empresas
occidentales son poco generosas con sus empleados
Negocio:
Uno de los aspectos más
importantes por no decir el más importante en una reunión es el intercambio de
las tarjetas, para ellos es tema ABSOLUTAMEN TE trascendental.
Cuando alguien te ofrece una
tarjeta (Meishi), tienes que tratarla con si te diese una piedra preciosa y
delicada, con todo el respeto que te puedas imaginar, haciendo mil reverencias,
dando las gracias, leyendo en alto primero el nombre de la empresa y luego el
nombre de la persona y guardarlo en un lugar apropiado, es un signo de muy mal
gusto guardarte directamente la tarjeta en el bolsillo.
Todo el mundo tiene un
porta-tarjetas, y es allí donde se debe de guardar la nueva tarjeta.
Alguien que no tenga tengo
respeto por la tarjeta no tendrá respeto en el trato con la persona, por lo que
no es una buena referencia para hacer un negocio. Para un occidental es hasta
divertido hacer las reverencias, es como una interpretación de teatro.
Otro punto importante es el
vestuario, se tiene que ir de rigurosa chaqueta y corbata en tonos oscuros, es
una ofensa si en una reunión una de las empresas no va con el vestuario
apropiado.
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